Una vez más se ratifica la enorme seguridad de los autos de Fórmula 1. Ayer durante el GP de Bélgica el piloto danés Kevin Magnussen sufrió una fuerte colisión contra las barreras de protección en Spa-Francorchamps. Afortunadamente salió por sus propios medios del auto y afirmó que estará listo para volver al auto este fin de semana en Monza.

La única consecuencia de este impacto fue un corte en su tobillo, pero nada que lamentar teniendo en cuenta la violencia del impacto. Una vez sucedido el incidente, fue trasladado al centro médico del circuito y luego a un hopistal en Verviers, para realizarle toda clase de chequeos, los cuales descartaron cualquier inconveniente físico.

El incidente se produjo en la vuelta 9. Magnussen salió de la mítica curva Eau Rouge y posteriormente perdió el control del auto en Raidillon. Esto generó la suspensión de la carrera durante 15 minutos, mientras se reparaban las barreras de protección.

Mediante su cuenta en Twitter, Magnussen emitió el siguiente mensaje a sus seguidores: "¡Muchas gracias amigos! Ahora en camino a casa con un tobillo lastimado, pero estaré listo para Monza".